Divisiones corticales
Los hemisferios cerebrales tienen un aspecto externo id茅ntico, pero las funciones que desempe帽an sus distintas partes son muy diferentes. La corteza cerebral de cada hemisferio se divide anat贸micamente en cuatro l贸bulos principales: frontal, temporal, parietal y occipital. Estos l贸bulos se pueden diferenciar en la superficie cerebral mediante diversas marcas anat贸micas, tal como son las circunvoluciones y los surcos. Una circunvoluci贸n est谩 constituida por el plegamiento de la corteza que tiene lugar durante el desarrollo. Un surco es una zona de depresi贸n que separa dos circunvoluciones; los surcos tambi茅n se denominan fisuras. Las circunvoluciones y los surcos que se observan en la superficie cerebral act煤an como l铆mites de los distintos l贸bulos.
Mapas de localizaci贸n corticales
Durante m谩s de un siglo, los neuroanatomistas han dividido y clasificado la corteza del cerebro humano en distintas 谩reas. Las abundantes iniciativas para dividir la corteza cerebral en 谩reas diferentes se iniciaron a partir de los logros sin par de Paul Broca. En 1861, Broca demostr贸 que las diferentes regiones corticales se asociaban a funciones mentales distintas, una de las cuales era la expresi贸n del habla. Los sistemas de localizaci贸n que se definieron posteriormente estuvieron fundamentados con frecuencia en el estudio celular de la corteza realizado con m茅todos histol贸gicos. Estos m茅todos permiten la cartograf铆a de la citoarquitectura en esquemas o mapas de las diversas estructuras cerebrales de la corteza. El mapa m谩s popular, desarrollado por el neur贸logo alem谩n Korbinian Brodmann (1868-1918), se puede observar que cada 谩rea de la corteza tiene n煤mero, lo que constituye un m茅todo mucho m谩s adecuado para especificar la localizaci贸n cortical que el uso de una descripci贸n compleja de las circunvoluciones y los surcos. El mapa de Brodmann ha sido criticado debido a que segmenta la corteza en innumerables centros espec铆ficos, lo que implica que las 谩reas corticales muestran l铆mites claramente definidos; no obstante, es un m茅todo adecuado en la pr谩ctica cl铆nica para indicar la localizaci贸n cortical.
L贸bulos cerebrales
L贸bulo frontal
El l贸bulo frontal est谩 limitado en su parte anterior por el surco lateral, o fisura de Silvio, y en su parte posterior, por el surco central, o fisura de Rolando. El l贸bulo frontal representa aproximadamente la tercera parte de la superficie del hemisferio y en su interior hay una larga circunvoluci贸n inmediatamente por delante del surco central. Esta circunvoluci贸n prominente se denomina circunvoluci贸n precentral y representa la mayor parte de lo que denominamos corteza motora primaria (谩rea 4), aunque tambi茅n se utiliza el termino de «banda o corteza motora» para denominarla. En el 谩rea motora primaria se originan los axones que constituyen la v铆a motora de gran tama帽o denominada tracto piramidal, que desciende hacia la m茅dula espinal. Las neuronas localizadas en esta 谩rea motora primaria son las responsables del control voluntario de los m煤sculos esquel茅ticos del lado opuesto o contralateral del cuerpo.
Las conexiones entre el 谩rea de control correspondiente a la corteza motora primaria, por un lado, y los m煤sculos voluntarios que inerva, por otro, se disponen de tal manera que es posible elaborar un mapa del control motor ejercido por la corteza cerebral en el que aparecen los m煤sculos inervados por la corteza. Este mapa se ha denominado hom煤nculo, que en lat铆n significa «hombrecillo». Las 谩reas est谩n representadas de forma ascendente o invertida. El 谩rea de la representaci贸n cortical que recibe cada parte concreta no parece estar muy relacionada con el tama帽o de dicha parte corporal debido a que la pierna y el brazo tienen un 谩rea inferior a la mano o la boca. Las partes corporales que requieren una precisi贸n mayor en el control motor muestran una representaci贸n cortical m谩s amplia.
En el l贸bulo frontal del HI se encuentra una importante regi贸n conocida como 谩rea de Broca (谩reas 44 y 45). Ubicada en la circunvoluci贸n frontal inferior (3潞) del l贸bulo (2, 3 y 4), el 谩rea de Broca en la mayor铆a de las personas parece ser importante para la producci贸n de un habla fluida y bien articulada. El HI es el hemisferio dominante en la mayor铆a de las personas, lo que significa que este hemisferio controla las funciones del lenguaje. Aproximadamente el 90% de la poblaci贸n es diestra con dominio del HI para el lenguaje. Incluso la mayor铆a de las personas que son zurdas muestran dominancia izquierda en el lenguaje. Si se produce da帽o en el 谩rea de Broca en adultos cuyo HI es dominante para el lenguaje, por lo general ocurre una falla caracter铆stica en la producci贸n normalmente fluida del lenguaje verbal; si el da帽o se limita espec铆ficamente al 谩rea de Broca, esta falla suele ser transitoria. Si el da帽o resulta de una lesi贸n m谩s grande que incluye el 谩rea de Broca pero tambi茅n el tejido cortical circundante en lo que se conoce como la zona perisilviana, se puede diagnosticar un s铆ndrome cl谩sico de trastornos adquiridos del lenguaje o afasia, llamado afasia de Broca. La ablaci贸n del 谩rea del hemisferio no dominante correspondiente al 谩rea de Broca tiene un efecto sobre el lenguaje solo en un peque帽o porcentaje de la poblaci贸n.
Otra parte del l贸bulo frontal que tambi茅n se ocupa de la iniciaci贸n del movimiento es el 谩rea dedicada al control de los ojos. Los campos oculares frontales (谩rea 8) se encuentran justo por delante del 谩rea cortical premotora. Estas 谩reas participan en el inicio de movimientos oculares r谩pidos y en la direcci贸n de la atenci贸n.
El resto del l贸bulo frontal se compone de corteza de asociaci贸n, un tipo diferente de tejido cortical con una asignaci贸n funcional menos definida. Esta 谩rea frontal a menudo se denomina corteza prefrontal (谩reas 9, 10, 11, 46 y 47) y contiene las 谩reas de asociaci贸n frontal. Las 谩reas de asociaci贸n frontal son vitales para el funcionamiento ejecutivo exitoso. Un funcionamiento ejecutivo adecuado y bien desarrollado permite la ejecuci贸n de procesos no rutinarios que requieren planificaci贸n, an谩lisis, retroalimentaci贸n, autorregulaci贸n, etc. La capacidad de participar con 茅xito en la escuela, el trabajo, la familia y los entornos sociales depende de estas 谩reas de asociaci贸n frontal.
L贸bulo parietal
El l贸bulo parietal est谩 delimitado anteriormente por el surco central, inferiormente por el extremo posterior del surco lateral y posteriormente por un l铆mite imaginario. La corteza sensorial primaria, tambi茅n conocida como somatosensorial o somest茅sica, se encuentra en el l贸bulo parietal (谩reas 1, 2 y 3), la mayor parte de la cual es la circunvoluci贸n poscentral. Tambi茅n se conoce como la tira sensorial, pero es 煤til usar el t茅rmino somatosensorial para ayudar a recordar que aqu铆 se procesan las sensaciones corporales, a diferencia de las sensaciones visuales y auditivas. Esta circunvoluci贸n se encuentra directamente posterior al surco central o fisura de rol谩ndica. En esta corteza sensorial se puede mapear el control sensorial de varias partes del cuerpo. Las sensaciones somest茅sicas (p. ej., dolor, temperatura, tacto) se env铆an a la corteza sensorial desde el lado opuesto del cuerpo. Esta disposici贸n es una imagen especular de la tira del motor.
Es importante localizar dos circunvoluciones en el l贸bulo parietal y familiarizarse con ellas en lo que respecta al lenguaje. El primero es la circunvoluci贸n supramarginal (谩rea 40), que se curva alrededor del extremo posterior de la cisura de Silvio lateral. El segundo, la circunvoluci贸n angular (谩rea 39), se encuentra directamente posterior a la circunvoluci贸n supramarginal. Se curva alrededor del final de un surco prominente en el l贸bulo temporal, el surco temporal superior. El da帽o en el 谩rea de la circunvoluci贸n angular en el HI dominante puede causar problemas para encontrar palabras (anomia), d茅ficits de lectura y escritura (alexia con agrafia), as铆 como desorientaci贸n de izquierda a derecha, agnosia de los dedos (incapacidad para identificar los dedos) y dificultad con la aritm茅tica (acalculia).
La circunvoluci贸n poscentral (corteza somatosensorial) es un 谩rea cortical primaria, mientras que la mayor parte de la corteza del l贸bulo parietal restante se compone de corteza de asociaci贸n, principalmente relacionada con la funci贸n de asociaci贸n somatosensorial y visual. El l贸bulo parietal se ha caracterizado como el “谩rea de asociaci贸n” debido al procesamiento multimodal que tiene lugar all铆. En conjunto, los l贸bulos parietales pueden ser los m谩s lateralizados en funci贸n de todos los l贸bulos del cerebro, aunque la especializaci贸n no es completa. Las funciones del lenguaje tienden a concentrarse en el l贸bulo parietal izquierdo alrededor de las circunvoluciones que acabamos de comentar. En el hemisferio no dominante, la corteza de asociaci贸n del l贸bulo parietal procesa principalmente la informaci贸n espacial y la atenci贸n selectiva relacionada. El da帽o aqu铆 puede resultar en dificultad para prestar atenci贸n o en un completo descuido del lado contralateral del espacio. Se pueden encontrar deficiencias visuoespaciales y de construcci贸n (como en el dibujo, la construcci贸n de modelos peque帽os, etc.) al evaluar al paciente con da帽o en el l贸bulo parietal del HD.
L贸bulo temporal
El l贸bulo temporal es el asiento del procesamiento auditivo en el cerebro. Est谩 delimitado superiormente por la cisura de Silvio y posteriormente por una l铆nea imaginaria que forma el borde anterior del l贸bulo occipital. Dos circunvoluciones del l贸bulo temporal son prominentes en la superficie lateral del cerebro: las circunvoluciones temporal superior y media. La 3潞 circunvoluci贸n importante, la circunvoluci贸n inferior, puede verse en la superficie lateral pero tambi茅n contin煤a en la superficie interior del l贸bulo. Menos visibles en la superficie lateral son las circunvoluciones temporales transversas (谩reas 41 y 42), que se pueden encontrar en el borde superior del l贸bulo temporal, extendi茅ndose profundamente en la superficie medial del cerebro. La circunvoluci贸n transversa de Heschl (m谩s com煤nmente llamada circunvoluci贸n de Heschl), 谩rea 41, forma la corteza auditiva primaria y representa el centro cortical para la audici贸n en cada hemisferio. Hay una representaci贸n bilateral de la se帽al auditiva, aunque m谩s fibras terminan en la circunvoluci贸n del hemisferio contralateral de las que terminar谩n en el lado ipsilateral del cerebro. La capacidad de detectar la presencia de sonido es una funci贸n del mecanismo auditivo perif茅rico y de los nervios auditivos. El 谩rea cortical es el sitio de procesamiento consciente de esos impulsos como "sonido", lo que nos permite percibir estas se帽ales como sonido y hacer lo que llamamos "escuchar".
El 谩rea 42 est谩 adyacente al giro de Heschl y es un 谩rea de asociaci贸n auditiva, aunque con frecuencia se presenta como parte del 谩rea cortical primaria de la audici贸n. Se ha descubierto que participa en el procesamiento de patrones arm贸nicos y r铆tmicos. El da帽o unilateral en las 谩reas 41 y/o 42 de la corteza auditiva no causa sordera en un o铆do, sino que puede resultar en dificultad para interpretar un sonido o localizar un sonido en el espacio. Las lesiones bilaterales en la corteza auditiva provocan lo que se conoce como sordera cortical.
La parte posterior de la circunvoluci贸n temporal superior en el l贸bulo temporal izquierdo es el 谩rea de asociaci贸n auditiva, mejor conocida como 谩rea de Wernicke (谩rea 22), que es importante para el desarrollo y uso del lenguaje. El da帽o al 谩rea de Wernicke puede resultar en una clasificaci贸n particular de trastorno adquirido del lenguaje llamado afasia de Wernicke.
En la cara medial de los l贸bulos temporales, cerca del plano sagital entre los dos hemisferios, se pueden ubicar varias 谩reas cerebrales profundas importantes para la memoria. Estos incluyen la regi贸n del hipocampo y la circunvoluci贸n parahipocampal. En la circunvoluci贸n parahipocampal se pueden encontrar 谩reas subcorticales conocidas como cortezas perirrinal, parahipocampal y entorrinal.
Si se separan los dos bordes de la cisura lateral (de Silvio), se puede ver una estructura cortical llamada 铆nsula, o isla de Reil, escondida debajo del 谩rea donde se unen los l贸bulos temporal, parietal y frontal. Incluye algunos de los tejidos corticales m谩s antiguos del cerebro. La 铆nsula no forma parte del l贸bulo temporal ni de ninguno de los cuatro l贸bulos principales, pero se considera un l贸bulo en s铆 mismo. Las conexiones de fibra a la 铆nsula no est谩n bien definidas y las funciones no se comprenden bien, pero se cree que la 铆nsula recibe informaci贸n sobre el dolor y la informaci贸n viscerosensorial. Las lesiones que afectan a la 铆nsula en el hemisferio dominante tambi茅n pueden contribuir a la dificultad para producir un habla fluida y bien articulada.
L贸bulo occipital
El l贸bulo occipital ocupa la peque帽a 谩rea detr谩s del l贸bulo parietal y est谩 marcado en la superficie lateral por l铆neas imaginarias en lugar de surcos prominentes. Dos surcos que pueden encontrarse en la superficie medial del cerebro que ayudan a localizar el l贸bulo occipital son el surco parietal-occipital y el surco calcarino. El l贸bulo occipital se ocupa de la visi贸n, con el 谩rea visual primaria (谩rea 17) ubicada en las circunvoluciones que bordean el surco calcarino.
Zona perisilviana
La corteza que rodea la cisura de Silvio en el l贸bulo temporal dominante (que queda para la mayor铆a de la poblaci贸n) se identifica como la zona perisilviana, donde se encuentran los principales componentes neurol贸gicos para comprender y producir el lenguaje. Estos componentes incluyen el 谩rea de Broca, el 谩rea de Wernicke, las circunvoluciones supramarginal y angular, as铆 como los principales tractos de asociaci贸n largos que conectan los componentes.
Webb, W., & Adler, R. K. (2016). Neurology for the Speech-Language Pathologist - E-Book (English Edition) (6.a ed.). Mosby.
